Artista holandesa.
Sus obras tienen formas más abstractas, los elementos y estudios clásicos inspiran frecuentemente sus nuevas obras. Formada como escultora, su trabajo se centra en lo físico. En el color, la forma, la técnica, el proceso, el material informa su trabajo. Trabajando con un enfoque feminista, gran parte de su trabajo habla de sus experiencias personales como mujer.
Como muchas otras chicas en su época, trabajó como enfermera. No fue hasta muchos años después que pudo hacer lo que realmente quería: estudiar en la academia de moda y más tarde convertirse en escultora. Hoy en día, Catharina proyecta sin miedo su identidad femenina, usando formas táctiles, colores brillantes y formas comúnmente masculinas. Como madre y abuela, la artista se siente abierta a abordar temas como el sexo, las drogas, el poder o la riqueza. Catharina se enfrenta a cada espectador. Varios temas importantes están presentes en su serie de trabajo: poder - fuerza - lujuria - tranquilidad. Cuando su obra comenzó, inicialmente asoció el poder dentro de lo masculino y la fuerza dentro de lo femenino, siendo interno. A medida que su trabajo progresó, se enfrentó a esta idea errónea y encontró tanto poder como fuerza en lo femenino, tanto interno como externo.
